FRONTERA, COAHUILA.- Madres de familia del jardín de niños María Enriqueta Camarillo de Pereyra se manifestaron este lunes para exigir la instalación de un techo estructural que proteja a casi 100 alumnos de las altas temperaturas. Al menos 15 niños se han enfermado por la exposición al calor extremo.
Desde las 8:00 a. m., un grupo de 20 madres cerró con candado los portones del plantel, ubicado en la colonia Héroe de Nacozari, y advirtió que no reabrirán el kínder hasta recibir una respuesta concreta de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
"Esto lo hemos pedido por más de siete años y siempre nos piden lo mismo: que hagamos oficios, que esperemos. Pero ya estamos cansadas", reclamó Diana Villarreal, acompañada de otras madres como Yesica, quien también denunció la omisión de las autoridades.
Las manifestantes aseguran que al menos 15 menores han presentado vómito, diarrea y dolor de cabeza por el calor. Recordaron que durante el evento del 10 de mayo, realizado en la cancha sin sombra, 6 de los 24 niños asistentes se enfermaron.
"Se hacen actividades temprano por el sol, pero no es suficiente. El calor afecta la salud de nuestros hijos. No suspenderemos clases, pero tampoco vamos a quitar los candados hasta que nos escuchen", añadió Villarreal.
Las madres denunciaron que, pese a la gravedad del problema, ninguna autoridad educativa acudió al lugar. Acusaron que la directora del plantel, Argelia, solo les pidió nuevamente que hicieran un oficio a estructura educativa, lo cual consideran una solución insuficiente.
Esta acción representa un llamado urgente para que las autoridades prioricen el bienestar infantil ante las condiciones climáticas extremas que afectan a la región.