FRONTERA., COAH.-Con más de 30 años dedicada al comercio informal, doña “Siri” asegura que la post pandemia ha dañado de gran forma la economía de los comerciantes, esto debido a que las ventas han bajado mucho, por lo que en ocasiones llegan y se van sin realizar una sola venta.
Dedicada a la venta de mandiles, manteles bordadas y otros artículos realizados de manera artesanal, la mujer de la tercera edad quien es ampliamente conocida por los comerciantes locales e incluso por los miembros de la comunidad, aseguró que ya es difícil vivir del comercio ya que si no fuera por una pensión que recibe no tendría la forma de salir adelante.
Dijo que si bien lo que vende la ayuda a cubrir los gastos del día, hay ocasiones en que no realiza ni una sola venta, en otras ocasiones logra vender 40 pesos y cuando mucho regresa a su hogar con 300, siendo sus clientes de siempre los que adquieren sus productos sin “regatear”.
Yo llegué aquí a la calle Francisco I. Madero hace 30 años y comencé a vender bordados, mandiles, servilletas y coberturas para electrodomésticos, las cuales prefiero hoy en día comprar para revender, ya que no es conveniente bordarlos de manera artesanal, debido a que la gente regatea la mayor parte del tiempo y no pagan el justo precio que se merece un trabajo hecho a mano, dijo la doña Siri.
Es importante señalar que la calle Madero es el sector comercial más reconocido de ciudad frontera, área en la decenas de comerciantes trabajan día a día para llevar el sustento a sus hogares y es por esta razón que solicitan a la comunidad comprar de manera local, pues para ellos la reactivación que se está dando, es de gran beneficio pues esperan recuperarse de las pérdidas que sufrieron durante la pandemia.
