FRONTERA., COAH.- “De frente le respondo a la ciudadanía de Frontera, soy inocente de los señalamientos que se me imputan y por ello me presento ante la ley con la frente en alto y tranquilo, entiendo que son períodos pre políticos en donde se pueden inventar muchas cosas, sin embargo mi labor al frente de la administración no está en juego porque las acusaciones son infundadas.
Después de que fuera vinculado a proceso por supuestas amenazas e intimidaciones en contra de una periodista de la localidad, el presidente municipal Florencio Siller Linaje aseguró que él está tranquilo y trabajando más que nunca en favor de los fronterenses, quienes le dieron el voto de confianza y lo respaldan en esta situación.
“Las leyes son muy claras y yo respondo como ciudadano, me mandaron llamar y me presenté por qué es mi derecho y responsabilidad civil, pero tengo las pruebas necesarias para aclarar esta situación, la cual se da precisamente antes de los periodos electorales”.
Dijo que en pasados días acudió al llamado del Juez federal que es el encargado del caso, sintiéndose tranquilo en todo momento y llevando el tema como un ciudadano común, con responsabilidades y derechos.
Mencionó que en pocos tiempos podrá dar más datos de este caso e incluso aclarar algunos cuestionamientos que los medios de comunicación y la sociedad en general tienen de su persona, pero se tiene que respetar los periodos de investigación, ya que sus abogados particulares ya están a cargo de este caso.
“Los señalamientos que se me hacen los estoy recibiendo de forma tranquila porque estoy seguro que soy inocente, este proceso se tiene que llevar como lo marca la ley, sin embargo no repercute en nada en mi labor como alcalde, pues las fechas que señala quien me acusa corresponden al tiempo en que yo era un ciudadano sin investidura”.
Además aclaro que no se le solicitó que se separara de sus funciones, por lo que terminará el año trabajando a favor de la comunidad y de los niños, que son quienes le han dado su confianza para seguir adelante con este proceso que será llevado a la par de la labor en la administración pública.