SAN BUENAVENTURA-COAH.- Año Nuevo es un día más para la familia de Norma Cecilia Ortiz Mata, no hay nada que celebrar la noche de hoy, su mesa carecerá de lujos y se conforman con una cena normal tal vez frijoles, huevos o sopa pero conseguida con mucho esfuerzo.
La situación económica de esta familia es delicada, viven en extrema pobreza en el ejido Saca de Bucareli, alejados de los servicios públicos, en despoblado en un cuarto construido a base de madera, cartón y hules donde el frio se siente más fuerte y logra entrar por cada rincón de su frágil vivienda.
Fue un año de salud que es lo importante para la joven madre y sus hijos.
“Entrará el año nuevo, las carencias seguirán, pero agradezco a Dios por permitir que mis hijos y yo lleguemos con salud y unidos”, dijo la madre de familia de 24 años de edad.
Norma Daniela, Rosita Dayana y Estrella Guadalupe de 8, 6 y 3 años de edad, hoy se irán a la cama temprano, seis o siete de la tarde empiezan a arreglar la cama pues saben que después no habrá manera de ver porque no cuentan con energía eléctrica.
La única luz que los ilumina es la luna, las estrellas y en ocasiones la linterna de un teléfono celular que la joven madre tiene que ir a cargar a 150 metros de distancia donde si hay servicio de energía y un enchufe donde conectar el cargador del celular.
La humilde familia recientemente se cambió al ejido Saca de Bucareli porque en casa de renta pagaban 800 pesos mensuales y no les alcanzaban por lo que decidieron adquirir un terreno rustico, sobre una calle que no tiene nombre, dijo Norma.
Contó que de no ser por Presidencia Municipal no hubieran cenado la noche de navidad, tampoco sus tres niñas habrían recibido juguetes que llevaron los policías municipales.
Dos muñecas, un bebecito, dos balones de futbol, una patineta, piñatas y dulces hicieron felices a los tres niños el día de navidad quienes se ven felices en jugando en el patio todo el día al encontrarse de vacaciones.
En el ejido Saca de Bucareli vive la familia en una casa frágil.
Expertos del clima pronosticaron temperaturas de 4 grados centígrados horas antes de la llegada de año nuevo, la familia no cuenta con cobertores para proteger a las niñas, toda vez que el aire se filtra por las paredes de madera y cartón y cuando llueve se siente más el frio.
