Allende, Coah.- La Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero aseguró que habrá justicia para las familias afectadas por la masacre del 2011 y dijo que se están llevando a cabo las investigaciones para fincar responsabilidades en uno de los hechos más violentos de la historia actual del país.
Aunque en su mensaje la representante del Gobierno Federal externó que autoridades de los diferentes órdenes de gobierno, así como corporaciones policiacas están involucradas en estos hechos, en entrevista dijo que tiene que esperar los resultados de la investigación para señalar culpables.
Dejó en claro que el evento que se realizó el día de ayer no sólo es un acto protocolario y no se realizó únicamente en cumplimento de la recomendación emitida por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, sino que es una de las prioridades de la federación, garantizar la seguridad de los ciudadanos.
Reconoció la molestia que existe entre las víctimas de estos hechos, y señaló que como autoridad se apoyará a las instituciones para la investigación y garantizar que se haga justicia a las familias afectadas.
La Secretaria de Gobernación negó señalar directamente a ex funcionarios de ser parte de este crimen y dijo que sólo las investigaciones y las evidencias son las que darán la pauta para pronunciarse, tanto a los jueces como a los funcionarios.
Esto a pesar de que en el mensaje que dio a la población señaló que la masacre de Allende se dio en complicidad de la delincuencia organizada con el estado, quienes no intervinieron ante los hechos y posteriormente fueron las corporaciones policiales, quienes apoyaron en la desaparición forzada de muchas personas.
“Los “Z” en conjunto con autoridades municipales y bajo el soslayo de autoridades de otros órdenes de gobierno, desequilibraron la vida de la comunidad, en uno de los hechos más violentos de nuestra historia reciente”.
Por su parte el Subsecretario de Derechos Humanos Alejandro Encinas señaló que se hará la investigación y se castigará a los responsables de estos hechos, donde se tiene una clara muestra de la narcopolítica y se debe sancionar a quienes participaron.