Luego de dos años fue encontrado culpable por el delito de homicidio calificado y lesiones calificadas, Arnulfo Calamaco Martínez, en contra de Ricardo Apolonio Alarcón Rojas. Será el martes cuando se de a conocer la pena y la reparación del daño.
Fue a las 12:05 del mediodía que inició la audiencia bajo la causa penal 1356/2022, en la que se dieron los alegatos por parte de la agente del Ministerio Público como la asesora jurídica de las víctimas, así como de la defensa del imputado.
"Tranquilo hijo, me picaron", es la manera en la que abrió sus alegatos la agente con el fin de dar a conocer al Juez que se comprobó la participación de Arnulfo Calamaco en el delito de homicidio calificado con ventaja y lesiones leves calificadas.
Mencionó que se le suprimió la vida a Ricardo Apolonio el 9 de octubre por lesiones causadas con arma punzocortante, en este caso un cuchillo de mango negro que portaba el imputado, que al usarlo en su contra le hizo tres lesiones en el tórax, una de ellas directo al corazón que le provocó un shock hipovolémico. Esto fue comprobado de forma científica por el médico perito de la Fiscalía General del Estado y que incluso se corroboró mediante un ejercicio de simulación para representar la mecánica del delito.
"El médico confirmó que la víctima debió estar sentado en el vehículo y que fue en esa posición reducida y no en otra, donde se le apuñaló, ahí se le hirió en el brazo y por protegerse como reacción instintiva, es que el imputado lo hirió de arriba hacia abajo dejando expuesta el área. La víctima medía 1.84 metros, es por ello que las heridas no pudieron realizarse cuando él estaba de pie".
Así mismo reafirmó que el médico dijo que a las heridas con el arma en el cuerpo de Apolonio se le consideran como "marca del pececillo", quedando acreditado con las fotografías forenses. En esa misma testimonial se descartó que haya participado en una riña con los demás, ya que no presentaba hematomas ni escoriación en la piel, así mismo tampoco presentó ojos morados ni rasgos inflamatorios en los nudillos.
"Le arrebataron la vida con seis testigos ese día, entre ellos su hijo Ismael. Fue porque Arnulfo Calamaco se sentía líder y adulto en dicha reunión ubicada en la Colonia Aguilar. Su trofeo era la sangre de Ricardo Apolonio en sus manos".
Asi mismo tocó el turno de la defensa de dar sus alegatos, en el que señaló que lo usaron como chivo expiatorio ya que su cliente no era culpable. Para esto dijo que Brandon Orlando afirmó que Arnulfo estaba peleando con él y que también lo lesionó en el codo para luego correr del lugar y que cuando se dio cuenta de la sangre vio que tenía una herida pequeña de un centímetro.
"Cómo pueden culpar a mi cliente de haberle realizado heridas grandes a Ricardo cuando él tenía una navaja pequeña, y el cuchillo que mencionan manchado de sangre nunca se corroboró que era la sangre del hoy fallecido".
Señaló que también hay pruebas científicas y de los peritos que había mucha sangre afuera del automóvil, corroborado por los oficiales, por lo que su hipótesis comprueba que la víctima fue lesionada con varias armas y varias personas. Así mismo hizo referencia a que Gilberto alias "Ñoño", tenía problemas con Ismael, hijo de Apolonio, y por último la defensa añadió una última teoría argumentando que fue Apolonio quien le quitó la navaja a Gilberto cuando lo estaba atacando y es por eso que fue encontrada debajo de su asiento.
El Juez Israel Dávila dio un receso de más de 3 horas y se retomó la audiencia para la resolución del caso a las 5:00 de la tarde, donde dio a conocer que encontró al imputado como culpable por el delito de homicidio calificado y lesiones calificadas. Será el martes 22 de octubre que se retome la audiencia para dar a conocer la pena y la reparación del daño.