Con la bata y el catéter aún puestos, José Luis Galarza Palacios denunció haber sido maltratado por el médico de turno quien lo llamó “cirroso” y lo dio de alta del hospital móvil argumentando que tenía que atender problemas de salud más importantes.
El señor de 54 años de edad, viajó desde la ciudad de Piedras Negras el pasado lunes para tratarse las hemorragias esofágicas superiores, dijo estar adherido al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), llegó al Hospital Amparo Pape ya que en el norte no cuentan con medicamento, aparatos ni espacio necesario debido a la contingencia del Covid-19.
“Con mi papelería el doctor me vio y dijo que andaba muy malo, traía mi hemoglobina de 5.5 cuando debo traerla de 15, me internó y puso suero por la noche. Llega otro doctor y le explico que vómito y expulso sangre y dijo que yo era un cirroso”.
José Luis le respondió que aunque así fuera, debían de darle el servicio y aplicarle sangre como había indicado el primer doctor que lo vio y no lo hicieron, el paciente también compró sus medicamentos.
Ayer martes antes de las 4:00 de la tarde, el galeno le quitó el suero y le pidió firmar un documento de alta.
“Yo aquí no atiendo cirrosis ni tengo aparatos para tratar a ese tipo de personas”, le comentó el doctor a José Luis y junto a la trabajadora social y otros compañeros, le señaló que no lo atenderían, que se fuera a un hospital privado y le entregaron el documento de alta.
Galarza Palacios acudió a Periódico LA VOZ todavía vestido con la bata y el catéter en su brazo derecho, para denunciar el mal momento que le hicieron pasar.
“Yo vengo de Piedras Negras para saber qué es lo que tengo y me sacaron de la cama donde me tenían, existe mucha prepotencia entre los médicos”, señaló el paciente.
Finalmente se marchó mencionando que se iría a un hospital privado.