El obispo de la diócesis de Saltillo Hilario González se abordó la creciente desintegración familiar y las problemáticas sociales que enfrentan los ex obreros de Altos Hornos de México (AHMSA), quienes han visto deteriorarse su calidad de vida tras la crisis económica de la empresa.
Monseñor enfatizó que, así como la comunidad ha mostrado solidaridad y apoyo hacia los migrantes que atraviesan la región, es fundamental extender esa misma ayuda a las familias locales. "No podemos ignorar a nuestra propia gente. Es momento de unirnos, de ser solidarios con aquellos que están aquí, en Monclova, enfrentando dificultades", expresó.
Durante décadas, AHMSA representó el pilar económico de Monclova, generando empleo, recursos y abundancia para miles de familias. Sin embargo, la situación actual ha revertido ese panorama, dejando a muchos ex obreros en la incertidumbre laboral y jurídica. Monseñor destacó la necesidad de apoyar a estos trabajadores en su búsqueda de empleo digno y de soluciones legales que les permitan recuperar su estabilidad.
"En su tiempo, AHMSA fue el motor que impulsó la prosperidad de esta región. Ahora es nuestra responsabilidad, como sociedad y como iglesia, no dejarlos solos. Es urgente ayudarlos a encontrar los recursos jurídicos y laborales que les permitan salir adelante", señaló.
El obispo hizo un fuerte llamado a quienes tienen en sus manos el poder de tomar decisiones que pueden transformar el destino de estas familias. "No se puede seguir postergando. Las autoridades deben actuar ya para implementar soluciones reales y concretas que beneficien a estas personas que lo han perdido todo", afirmó con preocupación.