La familia de José Eduardo lo llama un milagro. El joven estudiante del Cecytec, que fue atropellado el pasado 30 de abril mientras se dirigía en su motocicleta, despertó después de varios días en coma. Había sido trasladado a la Clínica 21 del IMSS en Monterrey por la gravedad de sus lesiones, pero para sorpresa de todos, al llegar al hospital abrió los ojos, movió manos y pies, y su estado mejoró de forma inesperada.
José Eduardo había sido diagnosticado con fractura de columna, lesiones en los pulmones y un coágulo en la cabeza. Su familia vivía momentos de angustia y dolor, sin saber si volvería a despertar. Por eso, cuando vieron que reaccionó al llegar a Monterrey, no dudaron en agradecer a Dios. “Es un milagro, no hay otra forma de explicarlo”, dijeron entre lágrimas.
Después de esa mejoría, los médicos decidieron regresarlo a Monclova, a la Clínica 7 del IMSS, donde continuará en observación. Aunque aún no puede hablar, su evolución es positiva y su familia no pierde la fe en que pronto podrá comunicarse. “Ya con verlo abrir los ojos, ya con saber que está aquí, es suficiente para estar agradecidos”, compartieron sus seres queridos.
Pese al alivio, la familia no olvida que la mujer que presuntamente lo atropelló sigue sin enfrentar consecuencias. Aseguran que huyó del lugar del accidente y exigen que la Fiscalía actúe conforme a la ley. “Pedimos que se le haga justicia a José Eduardo. Él está luchando por su vida, y la persona que lo dejó tirado en el pavimento no puede seguir como si nada”, expresaron.