Monclova, Coahuila.– En medio de una severa ola de calor que afecta a la región y que ha provocado desmayos y afectaciones entre familiares de pacientes del IMSS, el recién nombrado secretario del Sindicato del Instituto Mexicano del Seguro Social, Raúl Rosales, dijo "desconocer" la protesta realizada por ciudadanos que exigían condiciones dignas al exterior del hospital. La respuesta no solo generó indignación entre los afectados, sino que se vio rematada con el colmo del desinterés: colgó la llamada a medios de comunicación.
"Desconozco porque no estaba en oficina", fue la única declaración del dirigente sindical, antes de cortar abruptamente la llamada. La manifestación no fue menor: decenas de personas, desesperadas por el calor extremo y la falta de espacios adecuados para esperar noticias de sus familiares internados.
Resulta inaceptable que una autoridad sindical recién nombrada, en lugar de tomar cartas en el asunto o al menos mostrar disposición al diálogo, opte por la evasión y el silencio. Más aún cuando las condiciones denunciadas son visibles y comprobables por cualquier ciudadano que se acerque a las afueras del Hospital General de Zona No. 7 del IMSS, donde la desesperación y el riesgo sanitario son parte del día a día.
Hasta el momento, ni el sindicato ni la dirección del hospital han dado respuesta formal a los reclamos. En contraste, las temperaturas siguen en aumento, con pronósticos por encima de los 42 grados en los próximos días. Mientras tanto, la indiferencia de quienes deberían defender a los trabajadores y atender a los usuarios se impone como una segunda agresión: la del olvido institucional.
