En el Hospital Amparo Papé de Benavides, un bebé nació de una madre adicta a la droga conocida como cristal. Las autoridades del hospital informaron que tanto la madre como el recién nacido se encuentran en buen estado de salud. Este caso es parte de una preocupante tendencia: aproximadamente el cinco por ciento de las mujeres embarazadas que dan a luz en este nosocomio consumen alguna sustancia tóxica, siendo el cristal la más prevalente.
Ángel García, titular del Hospital Amparo Papé de Benavides, descartó la atención a pacientes que usan el cristal para adelgazar, un fenómeno reportado en la región carbonífera. Sin embargo, confirmó que el hospital sí recibe y atiende a mujeres embarazadas que consumen esta sustancia.
"El día de hoy se entregó el documento de nacimiento. Tanto la madre como el recién nacido están en perfecto estado", comentó García. En conformidad con los protocolos del hospital, estos casos son remitidos a la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia (PRONNIF) para su seguimiento y atención.
El fenómeno del consumo de cristal entre mujeres embarazadas es una problemática creciente que demanda la atención de las autoridades de salud y los servicios sociales. El hospital continúa sus esfuerzos para proporcionar atención adecuada y garantizar la seguridad y bienestar de los recién nacidos y sus madres.
