Aunque el Centro Migratorio pone en la mira a Monclova a nivel internacional, el diálogo entre los países de Estados Unidos y México no ha resuelto el problema migratorio, señalan representantes de la iglesia católica.
Las instalaciones son positivas para todas las personas que se desplazan por la región centro, siempre y cuando no se pongan trabas a los migrantes o se les prive de la libertad en su búsqueda del sueño americano, señaló el Padre Jorge Guzmán.
“Si es de forma negativa la iglesia jamás apoyará esto ni estará de acuerdo, esperemos que sea para bien de quienes pretenden migrar”.
Dijo que el problema es bastante complejo, los países deben establecer el diálogo y acuerdos los cuales si se han llevado a cabo pero no se ha llegado a una solución al respecto ni han apartado estrategias concretas para detener la migración o darles estabilidad.
Mencionó que la inauguración del centro posiciona a Monclova un lugar a nivel internacional al convertirse en ciudad de tránsito para todas las personas que cruzan por la región centro, lo que les hace saber que hay mayor seguridad para poder transitar.
Así mismo, dijo que la iglesia católica seguirá ayudando a las familias migrantes en su paso por la región, sobre todo la parroquia del Verbo Encarnado para darles asistencia humanitaria y seguir luchando por los derechos fundamentales de las personas como la movilidad humana.
