El “regateo” y el pagar lo que el turista considera por los productos que ofrece el Mercado Zaragoza, es uno de los principales atractivos que se conjuntan con las ofertas de artesanías o comida típica de estados como Guanajuato, Chiapas, Oaxaca, Jalisco y Coahuila.
El presidente de los locatarios, Héctor Portillo Valdés, dijo que la tradición del Mercado es que los consumidores pagan lo que quieren, “ya es costumbre de los que vienen al mercado el buscar mejor precio”.
Los comerciantes prefieren vender barato y mucho, para que la mercancía este circulando, “aunque la ganancia sea mínima”, destacó el comerciante.
Y es que los turistas, así como los asiduos consumidores locales y de la región, no solo buscan variedad y tradición a buen precio, “comes aquí (restaurantes del mercado) a 40 o 50 pesos. ¿Dónde encuentran una comida tan buena y barata?”
El mercado está compuesto por 85 locales, 45 por ciento de estos venden artesanías, 35 por ciento comidas, el resto está repartido en boleros, curiosidades y una peletería.
De acuerdo a locatarios, la clave para atraer al consumidor es tener una amplia variedad de artesanías. Los comercios de artesanías son familiares y han pasado de generación en generación y ha subsistido gracias a que venden “poquito de todo”.
Los locales del mercado Zaragoza ofertan las artesanías más representativas de cada estado mexicano:
Del estado de Yucatán están las guayaberas; del estado de Guanajuato están artículos de piel, como chalecos, botas de su capital León; cerámicas del municipio de Dolores Hidalgo, de San Miguel de Allende, cuadros repujados y espejos, de Comonfort molcajetes, de San Francisco del Rincón ofertan los sombreros finos y de palma, entre otras artesanías.
Del estado de Jalisco, están los cintos y figuras como los viejitos de papel y todo tipo de figurillas de cerámica de Guadalajara y municipios cercanos a la capital del estado.
De Michoacán, los objetos de madera como las famosas guitarras, maracas tamborcito, entre otras artesanías como los huaraches de Azuayo.
De Oaxaca, el representativo vestido San Antonino que está cuidadosamente bordado a mano, así como blusas de monitos. Los vestidos poblanos son imprescindibles y de este estado se abastecen de una amplia variedad de objetos de ónix.
De Coahuila se ofertan los famosos sarapes de Saltillo y en Piedras Negras objetos de yeso como alcancías de cochinito y otras figurillas.
“Aquí se vende de todo, y de antemano el surtido hace la venta” agregó Portillo Valdés, quien agregó anteriormente los pedidos a proveedores se hacían por mayoreo cuando las ventas en el mercado eran amplias, lo que permitía ofrecer la mercancía más barata, pero hoy en día el surtido es minorista debido a la poca demanda, pero de cierta manera les ha permitido subsistir.
Si bien el mercado está pasando por momentos difíciles debido al bajo turismo y desinterés de los consumidores locales, los locatarios conservan el espíritu luchador y visionario de sus antepasados quienes asentaron este establecimiento para que permita conservar y distribuir la cultura mexicana.
Los locales del mercado Zaragoza ofertan las artesanías más representativas de cada estado mexicano.
De acuerdo a locatarios, la clave para atraer al consumidor es tener una amplia variedad de artesanías.
