Desde el inicio de la pandemia se ha visto disminuida la visita de donantes voluntarios ante el banco de sangre instalado dentro del Hospital General Salvador Chavarría Sánchez, en parte por la resistencia de la gente a visitar un hospital actualmente, pero también por la falta de campañas para concientizar sobre la importancia de la donación de sangre de manera altruista, mismas que se detuvieron precisamente para evitar aglomeraciones que representan riesgo de contagio.
“Sí, ha disminuido considerablemente el número de donantes durante la pandemia, sobre todo recibimos a donantes que son traídos directamente por los pacientes que ocupan una transfusión y por lo general son familiares, amigos o conocidos”, comentó Silvia Margarita Valles Vázquez, titular del Banco de Sangre.
Por otro lado, se percibe un alza en los casos de donación remunerada, posiblemente por la costumbre que han imprimido los centros de plasma en la vecina ciudad de Eagle Pass, donde los donantes reciben una compensación monetaria por sus donaciones, mismas que no son del todo viables en el caso de donación de sangre, esto debido a que la urgencia de conseguir una remuneración, podría provocar que el donante mienta en las encuestas previas con el objetivo de conseguir donar a toda costa con tal de recibir el pago por su donación.
“Si nosotros aceptamos gente que vende la donación, estamos aceptando gente que tiene factores de riesgo, por decir, yo me drogo y en la encuesta me preguntan que, si me drogo, pues con tal de conseguir el pago por mi donación, digo que no”, enfatizó Valles Vázquez.
Destacó también el caso de una persona que ha intentado en varias ocasiones donar sangre con el objetivo de la remuneración económica, pero que se encuentra registrado como “no apto” debido a que esta persona tiene VIH, por lo que, a pesar de la necesidad de abastecer el banco de sangre, se siguen protocolos estrictos para que las donaciones sean viables y el producto salve vidas, siendo este el objetivo principal.