“Bombardeado” por noticias del COVID – 19 en su entorno, Brayan Gael Ramírez Montalvo, de siete años, ha dejado de lado los juegos para pensar en crecer pronto, convertirse en doctor y encontrar una cura contra el virus, porque dice, con tono preocupado, que ya no quiere que muera más gente.
Hijo de Jorge Ramírez Medina y Elsa Karina Montalvo Galindo, pasará este día del niño con la misma incertidumbre de las últimas semanas, sobre todo porque su mamá es enfermera del Centro de Salud en Acuña y sabe que sale a curar gente, esa que escucha que ha enfermado, que no puede respirar por el contagio o que desafortunadamente, muere.
Si logra crecer pronto e ir a la universidad, hallará la vacuna que protegerá también a su mami que ayuda a los pacientes que ve en sus turnos en su trabajo; pero no solamente los va a curar del coronavirus, Brayan dice que quiere el remedio para todas las enfermedades nuevas que surjan en el mundo.
Un poco tímido, Brayan relata que le gustan más las letras que los números en la escuela, que va en el primero “A” y que a veces se aburre un poquito al estar en casa, pero se hace tarea y busca cosas con las que se pueda entretener.
Su mensaje para los pequeños como él es que se laven las manos, que permanezcan en sus hogares y sobre todo, que le hagan caso a sus papás: “Que no se desesperen”.
Brayan comparte que la situación que se vive actualmente lo pone muy triste: “La gente se está muriendo, lo veo en las noticias y por eso también le digo a mi mami y a sus amigos doctores y enfermeras como ella que se cuiden mucho, porque están ayudando a la gente”.
Salvar al mundo, es una de las frases recurrentes del pequeño de siete años que ya comienza a “ensayar” su profesión con su camisa blanca, cubre bocas, lentes y estetoscopio de juguete, el objeto más valioso que tiene pues en su imaginación de niño, escucha el corazón mientras se pregunta cuáles serán los “ingredientes” con los que se hace una vacuna.