MELCHOR MÚZQUIZ, COAH.- Escultor de Corazón, así se autodefine Néstor Antonio Espinoza Hernández, quien con más de 40 años como escultor, cuenta en su haber con miles de esculturas de piedra y madera las cuales pueden tener una finalidad mágica, ritual o de gran valor sentimental.
Ganador del primer lugar en el concurso estatal de artesanía “Mis Oficios, Mis Manos” Coahuila 2021 al crear una lagartija bien definida en piedra, Néstor expresa con entera satisfacción que este es el segundo premio que con mucho orgullo obtiene pues el año pasado 2020 también participó elaborando una aguililla en mármol.
Originario del Ejido San Miguel, Municipio de Ocampo, pero habitante de esta ciudad desde el año 2015, el ciudadano menciona que a la edad de 12 años comenzó su pasión por elaborar figuras a base de madera y de piedra al observar desde niño, el trabajo que realizaba un hombre de nombre Lázaro, el cual llegó de los 5 Manantiales al ejido, con dicho talento, aprendiendo Néstor de él “Yo pienso que absorbí la esencia de este señor”, menciona a LAVOZ.
“Múzquiz me ha brindado mucho apoyo, ahora sí que me adoptó, por ello vivo aquí muy feliz pues esta Región es una de las más bonitas de Coahuila.
“Desempeñar el oficio de escultor, es como todos los trabajos, tiene sus pros y contras en la elaboración de piezas que no es difícil elaborarlas si nos gusta hacerlo con amor, con pasión”.
En cuanto al costo, expresó: “Yo pienso que una pieza costosa es aquella que vale menos de lo que en sí cuesta y una pieza cara es aquella que no vale lo que es”, por ello pienso que no son costosas mis obras, para lo cual elaboro desde una imagen muy pequeña de 5 o 6 centímetros hasta una pieza de metro y medio o 2 metros.
Dijo que la satisfacción es lo más bonito que le deja este oficio pues es más bonito que pase alguien cuando está en los eventos, en los concursos y en exposiciones y le digan “Que bonitos trabajos haces”, a que pase alguien compre y pague, por ello, mencionó, causa más satisfacción cuando alguien aprecia tu trabajo, aunque no te compren.
En cuanto a la materia prima dijo que utiliza desde un árbol caído hasta una piedra con la que se tropieza, se pueden hacer trabajos con ello y eso abunda en este Municipio.
“Utilizamos además cinceles, formones, martillos, marro, gubias, arramaderas, lijas y para el pulido, las máquinas esmeriladoras.
Menciona Néstor Antonio que al año elabora por lo menos entre 30 o 40 mil piezas y de forma diaria entre 60 y 70 pues hablando de aves en un día elabora 80 u 90.
“Yo trabajo de acuerdo a lo que el cliente pida sin embargo tenemos algo bien estructurado, tengo pedidos para estos meses y los que vienen, es decir ya sabemos que van a solicitar desde mucho tiempo antes”.
Agregó que, son muy pocas las personas que solicitan piezas muy bien elaboradas pues lamentablemente la economía anda por los suelos.
Entre las piezas que ha elaborado destacan un jaguar, un caballo, una mosca, un pulpo, infinidad de imágenes “No tiene idea usted, lo que nos piden los clientes”, pues van desde cosas raras, cosas extrañas, cosas bonitas, cosas terroríficas, de todo.
“Con la pieza que más me he identificado es con los caballos, disfruto mucho elaborarlos, también los lobos, los perros y en el caso de los clientes encargan desde un santo, un demonio, un ángel, infinidad de cosas”.
Mencionó que al principio elaboraba las piezas solo, pero hoy en día cuenta con el apoyo de varios jóvenes trabajando con él a los cuales instruye.
“Estamos ubicados en un taller que se localiza en el barrio El Panteón, a espaldas de la Iglesia Guadalupe, ahí en el negocio marcado con el número 1702 tenemos el taller”, precisó.
Dijo que, en su labor, lo apoya su familia siendo parte fundamental su esposa Dolores Gaytán Villa; su madre, Fidencia Hernández Juárez y sus hijos, Diego Stiven, Néstor Julián y Zoe Abril quienes aún son niños pero ya toman los formones, las gubias y empiezan a practicar “me gusta mucho observar como a ellos les apasiona también dicho oficio”, refirió.
En cuanto al mensaje dirigido a los jóvenes que tienen la intención de ser escultores dijo: hay que luchar por nuestros sueños, hay que trabajar artesanalmente no nada más siendo escultor pues este es uno de los oficios más antiguos y más bonitos de la historia siendo parte de nuestra cultura.
Los jóvenes no deben de sentir pena, pues al principio yo miraba como que la gente decía “Este loco qué” pero después empezaron a venir los reconocimientos y premios ganados y ya la gente como que te empieza a tomar más en serio, empiezan a decir, “Este loco si está viviendo de su arte” en ese momento ya no te ven como a un loco, sino como a alguien interesante.
“Yo en lo personal confié siempre en mi talento, confío en mis manos, en mi inteligencia, porque yo sé lo que traigo, lo que puedo hace con mi talento”.
Así Néstor menciona que no tiene idea de cuantas son las esculturas que ha elaborado a lo largo de su vida, pero de lo que sí está seguro, es que lo hace con todo el amor del mundo y a mucho orgullo.
