PROGRESO, COAHUILA.- Los ataques que sufrieron varios ovinos en un rancho de la comunidad de Múzquiz, pudiera deberse a animales como coyotes o perros que se han aficionado a probar la sangre y carne, manifestó el presidente de la Asociación Ganadera de Múzquiz y también director de Desarrollo Rural Municipal, Alfredo Jiménez Morales.
Descartó que pueda deberse a un animal extraño, porque por experiencia personal en un tiempo tuvieron que deshacerse de algunas perras que, no por hambre, sino por juguetear con el ganado hicieron perder 25 borregos, les clavaron los colmillos hasta matarlas, tuvieron que vigilar en la noche para saber la causa de las muertes.
Alfredo Jiménez presidente de la Asociación Ganadera de Muzquiz, atribuyó el ataque contra los ovinos a perros o coyotes.
Externó que algunos perros ovejeros o que cuidan chivas, cuando estas paren empiezan a probar las placentas y se les gusta y si les llega a faltar alimento pueden llegar a matarlas, también cuando algunas cabras se cortan con el afán de que vuelvan al atajo tratan de disuadirlas mordiéndolas, prueban la sangre y luego les gusta.
Además es muy común el ataque de los coyotes, es por eso que el ganado es vigilado por perros, pero estos en ocasiones pueden volverse contra el ganado que están cuidando.
Por su parte no ha tenido reportes de los ganaderos de un ataque de esta naturaleza, atribuye a un mito la existencia del llamado “chupacabras”.
Alfredo Jiménez dijo que también esta situación se da en otro tipo de animales como los osos, por lo general son herbívoros pero cuando prueban la carne les gusta y se vuelven carnívoros.