NUEVA ROSITA, COAH. - Aún con las secuelas que le dejó la jauría de perros en la pierna izquierda, Erika de Hoyos Sánchez reanudó sus actividades en la elaboración de tortillas de harina, limpiando un domicilio y trabajando por la tarde en un restaurante.
Las heridas que le ocasionó la jauría de perros aún no cicatrizan pero la necesidad de sacar a sus hijos adelante la motivaron para continuar con su rutina que suspendió después del ataque de los perros que se registró el pasado mes de mayo.
Solamente uno de los dueños de los perros se negó a cubrir los gastos médicos que requería la lesionada, sin embargo con la ayuda de la ciudadanía y la ayuda médica que no le generó gastos logró salir adelante.
El propietario de uno de los perros que atacaron a Erika de Hoyos cubrió los gastos que se originaron durante la convalecencia de la joven madre de esta manera logró salir adelante aún con los cuidados que se requieren para evitar que se vuelvan a infectar las heridas.
Lamentablemente los perros que atacaron a Erika aún se encuentran en la calle, aunque ya no atacaron a ningún otra persona, sin embargo representan un peligro para los transeúntes de un sector de la colonia Roma.