MELCHOR MÚZQUIZ, COAH.- El mayor anhelo de su vida, Dios se lo concedió a Santa Lucía Cabrera García al poder ver a su hija Wendy Granados recuperada de salud y valerse por sí sola para cuidar de su pequeño hijo de 4 años de edad.
“Mi hija atravesó por situaciones sumamente difíciles después de haber dado a luz pues al no tener los cuidados maternos en el posparto, sufrió de cambios psíquicos y sociales a tal grado que perdió la memoria, destacó el ama de casa.
Posteriormente, un adulto mayor la privó de la libertad manteniéndola aislada en un domicilio durante varios días, afortunadamente Wendy fue rescatada con bien.
De ahí a la fecha, la han tratado sus padres, proporcionándole atención en psiquiatría, suministrándole medicando dado a una posible esquizofrenia que presentó la joven madre de familia quien ahora se recupera de ello y se le puede observar acompañada de su pequeño, dejando atrás los momentos de angustia para su madre al no saber de ella pues se la pasaba deambulando por las calles de Múzquiz.
Wendy tiene ya 5 meses recuperándose, convive más con su hijo, visita a sus familiares y mantiene una plática, destacando la madre de familia que este es el mejor regalo para ella en navidad, ver con salud a su hija.
WENDY GRANADOS LE PIDE A DIOS QUE NO LA ABANDONE
Platicando con la joven expresó sentirse mejor y estar consciente de lo que hace, “Ahora convivo con mi hijo Joan de 4 años”.
Dijo que durante pocos días permaneció privada de la libertad en un domicilio, hoy está tranquila, feliz al lado de su niño y de sus padres quienes la ayudan mucho.
“En esta navidad, quiero pasarla con mis papás y mi hijo pidiéndole a Dios que no me abandone, que nos ayude enviándonos bendiciones, porque uno que es pobre lo necesita y se siente muy feo estar así, expresó.