SABINAS, COAH. - Salvar la vida de sus hijas Lucinda y Ninfa, dio a la señora Cinthia Fuentes Frausto las fuerzas necesarias para destruir parte de la puerta de su habitación que se encontraba en llamas, tras estallar el tanque de gas butano que abastecía el calefactor que estalló al tratar de encenderlo, lograron salir arrastrándose fuera de su domicilio la tarde del pasado miércoles 18 de diciembre.
Cinthia Fuentes, propietaria del domicilio incendiado narró los hechos.
Eran alrededor de las 3 de la tarde cuando la ama de casa y sus hijas de 25 y 27 años de edad, se encontraban en el interior de una de las habitaciones de su hogar ubicado en la calle Francisco del Bosque #3209, en la Colonia del mismo nombre.
La baja temperatura que trajo consigo el frente frío número 23, motivó a la señora Cinthia a encender el pequeño calefactor alimentado por gas butano para mitigar el frío; pero jamás imaginó que al intentar encenderlo oprimiendo el botón, una fuga en el dispositivo provocaría que se completara la combustión, que de manera violenta la aventó contra la pared, iniciando así la lucha por su vida y la de sus hijas.
La reacción inmediata fue salir por la puerta de acceso principal a la habitación, pero, aunque la perilla giraba perfectamente, a pesar de poner todo su esfuerzo entre las tres no lograron abrirla, puesto que, al desplazar el oxígeno por el denso humo de la combustión de la habitación, se creó un alto vacío.
El instinto de conservación le dio a la madre la fuerza de empezar a golpear con los puños la parte inferior de la puerta de madera, para hacer un boquete y poder salir de la habitación que para ese momento era ya el mismo infierno que las intoxicaba, sin embargo, lograron el objetivo.
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Ayer realizaban el recuento de los daños.
El denso humo que emanaba del interior de la vivienda, provocó que vecinos de la familia solicitaron el auxilio al cuerpo de bomberos, sin embargo, en ninguna de las tres llamadas que se realizaron al número de emergencias hubo respuesta, por lo cual solicitaron el apoyo a la policía estatal antes Fuerza Coahuila, que a la vez hicieron el llamado a los bomberos.
Fue medida hora más tarde cuando los bomberos hicieron su arribo al lugar en la pequeña unidad de respuesta inmediata, lo cual no fue suficiente para controlar el fuego en la vivienda, siendo hasta la llegada de la unidad grande cuando se logró el objetivo.
Después de ser atendidas de la grave intoxicación que presentaban la señora Cinthia y sus hijas Lucinda y Ninfa, fueron trasladadas a la clínica 23 del Instituto Mexicano del Seguro Social para ser atendidas en la sala de emergencias, de donde afortunadamente lograron salir la mañana de este jueves 19 de diciembre.
Acompañada de sus hijas, amigos, familiares y vecinos, la señora Cinthia realiza labores de limpieza en su hogar, rescatando las cosas que podrán ser reutilizadas y desechando las que de plano no sirvan.
Después de vivir tan difícil experiencia, la ama de casa da gracias a Dios por que les permitió salir con vida de la habitación donde ella y sus dos hijas pudieron morir calcinadas.
