Un chicharrón con forma de México es considerado uno de los amuletos que este 17 de junio dieron el triunfo a la selección mexicana en su debut mundialista en Rusia.
Tras el perfecto 1 a 0 frente a los campeones del mundo, la afición reconoció que no esperaba un triunfo por las dudas que el seleccionador había sembrado en los amistosos. No obstante, con una fe renovada y muchas ganas de que algo bueno por fin ocurra, la alegría se transformó en risa y celebración.
Sea en la calle o desde sus ordenadores, los aficionados celebran que los 11 de Osorio escribieran un nuevo capítulo para México.
sdp
