El cantante de corridos tumbados Natanael Cano ha generado titulares nuevamente tras responder con ironía a una amenaza recibida mediante una narcomanta en Hermosillo, Sonora, donde se le señala junto con otros músicos de la región. La advertencia fue atribuida a Los Matasalas, presunta célula de Los Chapitos, hijos del narcotraficante Joaquín Guzmán.
La manta, que apareció cerca de una preparatoria, acusa a artistas como Cano, Tito Torbellino Jr. y Javier Rosas de brindar apoyo económico e influencias a grupos delictivos. Los firmantes exigieron que los músicos se "tumben el alucín" y se dediquen únicamente a su profesión, advirtiendo que, de no hacerlo, enfrentarán consecuencias fatales.
Lejos de expresar temor, Cano publicó en sus historias de Instagram una foto de cobijas con su imagen impresa y el mensaje:
"Las únicas mantitas que me preocupan ahorita (¿Y si calentaran?)"
Aunque la publicación fue eliminada poco después, los internautas no tardaron en compartir capturas de pantalla, lo que intensificó el debate sobre la respuesta del artista.
El nombre de Natanael Cano ha estado involucrado en polémicas legales. En agosto de 2023, fue vinculado a proceso tras intentar sobornar a policías en Hermosillo para evitar una multa por conducir a exceso de velocidad. Según la Fiscalía de Sonora, el incidente ocurrió el 29 de marzo, cuando el cantante manejaba un Dodge Charger rojo sin placas. Los oficiales lo detuvieron, y Cano ofreció dinero para evitar las sanciones.
La combinación de sus problemas legales y las amenazas recientes ha puesto a Cano bajo un escrutinio más intenso, alimentando las discusiones sobre los riesgos que enfrentan los intérpretes de corridos relacionados con el narcotráfico.
