Por problemas familiares, una mujer intentó escapar por la puerta falsa del suicidio, después de ingerir diversas pastillas de uso controlado, pero solo terminó en la sala de Urgencias de la clínica 7 del Seguro Social, donde le salvaron la vida.
A través de un informe policíaco, agentes investigadores de la Policía Ministerial del Estado señalaron que Keila Nohemí Urbana Espino, de 26 años de edad, ingresó la noche de ayer a la sala de Urgencias de la clínica siete.
Una vez que se dio a conocer el ingreso de la mujer, que vive en la calle Privada Gardenia número 224 de la colonia Occidental de Frontera, en estado de intoxicación con medicamento, agentes ministeriales acudieron al nosocomio para iniciar con las investigaciones correspondientes.
Al llegar al nosocomio, los elementos de la Policía Ministerial lograron entrevistarse con un familiar de Keila Nohemí, quien al ser cuestionada dijo que los hechos en donde resultara intoxicada, fue su domicilio.
Dijo que la mujer al estar al interior de su recámara, presumiendo que por diversos problemas familiares ingirió diversas pastillas, siendo sus mismos familiares los que al verla en mal estado procedieron a hacer el llamado al número de emergencias 911.
Atendiendo el llamado, los paramédicos de la Cruz Roja acudieron al domicilio de la frustrada suicida, procediendo a efectuar su traslado al hospital.
Tras ser internada, el estado de salud de la frustrada suicida es reportado por los doctores que la atienden como estable, sin embargo, fue necesario dejarla internada bajo estricta observación médica, ya que también padece de depresión mayor.
