Un avión de combate F-16 de las Fuerza Armadas de los Estados Unidos en el mar de Japón, cerca de la Basea Aerea de Kusan, en la ciudad de Gunsan, en Corea del Sur. El piloto logró ejecutar su asiente y este se encuentra sano y a salvo.
El piloto, que ‘se eyectó de forma segura y fue recuperado alrededor de las 09:30 horas’ por agentes tanto estadounidenses como surcoreanos, ‘está consciente y fue transportado a un centro médico para su evaluación’, reza un comunicado de la Base Aérea Kunsa K-8.
Las autoridades americanas agradecieron a las fuerzas surcoreanas que se unieron a los trabajos de rescate del piloto americano, quienes lograron el rápido rescate del mismo, el cual se encuentra en buenas condiciones de salud.
"Estamos muy agradecidos a las fuerzas de rescate de la República de Corea y a todos nuestros compañeros que hicieron posible la rápida recuperación de nuestro piloto", dijo el coronel Matthew Gaetke, comandante del 8º Ala de Caza, en un comunicado. "Ahora nos centraremos en la búsqueda y recuperación de la aeronave".
Esta es la tercera vez que un F-16 de los Estados Unidos cae en alguna base de Corea del Sur, aunque en las otras 2 ocasiones la pérdida de estos aviones fueron accidentes y no hay una conexión.
