El Instituto para el Desarrollo del Sur y del Norte dio a conocer que las autoridades del régimen de Corea del Norte, condenaron a dos adolescentes de 16 años a trabajos forzado por ver k-pop y películas surcoreanas.
“A juzgar por el castigo, parece que con esto se quiere mostrar a la gente de toda Corea del Norte lo que pasa, para advertirles. Si es así, parece que este estilo de vida de la cultura surcoreana prevalece en la sociedad norcoreana”, dijo Choi Kyong-hui, presidente de SAND y doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de Tokio, que desertó de Corea del Norte en 2001.
Corea del Norte lleva años imponiendo duras penas a cualquiera que sea sorprendido disfrutando del entretenimiento surcoreano o copiando la forma de hablar de los surcoreanos.
Los jóvenes son satanizados por sus verdugos por presuntamente haber visto y difundido películas, música y videos musicales surcoreanas.
“Se dejaron seducir por la cultura extranjera (…) y acabaron arruinando sus vidas“, afirma el narrador, mientras el vídeo muestra a las jóvenes esposadas y a mujeres de Pyongyang luciendo moda y peinados surcoreanos.
En Corea del Norte, la venta, distribución y posesión de material extranjero como películas, revistas, libros, música es esto como una alta traición, aunque la élite del país si puede disfrutar de estos servicios.