Artículo periodístico (aproximadamente 1800 caracteres):
Elon Musk, CEO de SpaceX, ha revertido su decisión de desmantelar la cápsula espacial Dragon, esencial para las misiones de la NASA hacia la Estación Espacial Internacional (EEI). La amenaza inicial surgió en medio de una disputa pública con el expresidente Donald Trump, quien sugirió cancelar los contratos gubernamentales con las empresas de Musk, incluyendo SpaceX y Starlink.
La cápsula Dragon ha sido fundamental para el transporte de astronautas y suministros a la EEI desde 2012, especialmente tras el retiro del programa del transbordador espacial. En 2024, la NASA otorgó a SpaceX un contrato de 843 millones de dólares para asistir en la desorbitación de la EEI prevista para 2030.
La amenaza de Musk generó preocupación en la NASA y el Departamento de Defensa, dada la dependencia crítica de Estados Unidos en SpaceX para misiones espaciales. Ambas agencias han comenzado a explorar alternativas con empresas como Blue Origin y Sierra Space, aunque estas aún no están listas para asumir roles similares.
La disputa entre Musk y Trump también ha suscitado debates sobre la concentración de capacidades espaciales en una sola empresa privada y los riesgos asociados a decisiones unilaterales que podrían afectar la seguridad nacional y la exploración espacial.
Por ahora, la cápsula Dragon continuará operando, asegurando la continuidad de las misiones espaciales estadounidenses y evitando una crisis inmediata en la exploración espacial.
