El santuario de vida, Centro de Defensa Wild Felid, ubicado en el estado de Washington, sufrió la muerte de la mitad de la población de los grandes felinos, esto debido a un brote de gripe aviar al interior del santuario.
Mark Mathews, director del santuario, señalo que 20 grandes felinos perdieron la vida tras infectarse con la enfermedad, quedando hasta ahora solo 17 grandes felinos. Actualmente, más felinos están enfermos con esta enfermedad.
"Estamos haciendo todo lo posible por cuidar a los animales que se están recuperando", dijo Jolie Connolly-Poe, empleada del santuario, quien expresó sentirse devastada por la rapidez con que el virus afectó a los felinos.
Por el momento se desconoce como fue que los animales se infectaron, pero se cree que sea debido a que estos animales habrían consumido aves salvajes, las cuales, han sido el foco de las infecciones en Estados Unidos.