El Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, dirigido por el talibán Khalid Hanafi, anuncio un nuevo paquete de restricciones contra de las mujeres de Afganistán, pues ahora se ha ordenado que las mujeres no hablen en voz alta.
El talibán señaló que las mujeres no podrán recitar el Coran, una práctica muy común en la religión, en voz alta, mucho menos en frente de otras mujeres,
"Si a una mujer no se le permite realizar Takbir, entonces ¿cómo se le podría permitir cantar?" preguntó Hanafi en su mensaje, indicando su postura contra la expresión pública y privada de las mujeres en Afganistán.
La comunidad internacional, incluidas las Naciones Unidas y organizaciones de derechos humanos, han expresado su preocupación por el retroceso en los derechos de las mujeres en Afganistán bajo el régimen talibán.
Desde el regreso del Talibán al poder, en toda la nación se han extendido las dementes creencias extremistas musulmanas, la amplia mayoría no son aceptadas, en otras naciones se practica la misma religión.
Entre las exigencias están, que las mujeres no muestren ninguna parte de su cuerpo, censurar ojos de pescados en revistas, destruir maniquís, no hablar en voz alta, limitar la educación a unos pocos y prohibir fotografías o grabar seres vivos.
