Birmingham, Inglaterra / Redacción: Las autoridades condenaron a 11 años de prisión a Carvel “N”, tras hallarlo culpable de abusar a una adolescente. La sentencia se hizo posible gracias a los esfuerzos de la hija de la víctima, quien nació como resultado del abuso sexual.
La denunciante, identificada como Daisy “N” para proteger su identidad y la de su madre biológica, realizó toda una campaña para conseguir justicia y pasó 9 años intentando castigar al violador, tras descubrir los detalles de su nacimiento.
Durante sus primeros 7 meses de vida, ella permaneció bajo tutela oficial del Estado antes de ser adoptada por una familia. Cuando tenía 18 años, Daysi se contactó con su madre por primera vez, pero después de 2 años protagonizaron un emotivo reencuentro.
Luego, la justicia británica demoró mucho en procesar al autor del crimen porque la mujer abusada no quiso demandarlo, ni aun años después de la violación. Además, las autoridades insistieron en que la víctima en términos legales, era la madre y no la hija.
“Soy una escena de crimen ambulante: quería justicia para mi madre y para mí; las ramificaciones de lo que el hombre de 74 años eligió hacer han dado forma a toda mi vida. Es por ese crimen que estoy viva y respiro, a prueba de una violación infantil”, sostuvo la hija.
