El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, anuncio que el controvertido Robert F. Kennedy Jr., tomara el poder del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), el principal organismo de salud del país.
«Ayudará a que Estados Unidos vuelva a estar saludable», dijo Trump en su discurso de victoria el 6 de noviembre. «Quiere hacer algunas cosas y le dejaremos hacerlo», dijo.
Este departamento está a cargo de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), los Institutos Nacionales de Salud (NHS) y los programas masivos de Servicios de Medicare y Medicaid.
La llegada de Robert F. Kennedy Jr pone en jaque al sistema de salud de Estados Unidos, pues este es un firme creyente del movimiento antivacunas, asimismo, es creyente de teorías conspirativas difundidas en X.
Robert F. Kennedy Jr fue denunciado por una empleada doméstica de haber abusado sexualmente de ella, algo que este no negó, afirmando tener «esqueletos en el closet» (frase usada para referirse a acciones erróneas en el pasado).
