El presidente Trump sigue con su cacería de brujas en contra de las figuras que se posicionaron en contra de él. Ahora el mandatario decidió penalizar al buffet de abogados de Robert Mueller, quien investigó al equipo de Trump en el 2016.
La orden presidencial impide a los empleados del bufete WilmerHale acceder a edificios federales y a información privada del Estado. Además, prohíbe a las agencias federales contratar sus servicios, salvo contadas excepciones.
Adicionalmente, de acuerdo con la orden, el Gobierno federal rescindirá los contratos en los que participe WilmerHale. Trump justificó la medida señalando que dirigió “una investigación partidista contra el presidente y otras personas”.
Robert Mueller fue nombrado como fiscal especial para investigar si el equipo de Donald Trump tuvo un acercamiento con agentes rusos para la intervención en las elecciones que le dieron el triunfo a Trump. Este determinó que o había evidencia suficiente para confirmar una interferencia rusa.