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Hora Cero

Murió y nadie se dio cuenta

Por Brenda Rebolloso - 08 junio, 2018 - 01:33 a.m.
Murió y nadie se dio cuentaEl cadáver fue llevado al anfiteatro.

El cuerpo de un solitario sexagenario fue encontrado en avanzado estado de putrefacción dentro de su domicilio ubicado sobre la avenida Húemac, luego que una de sus vecinas, al no verlo desde el viernes, decidió reportarlo a la Policía.

Fueron los fétidos olores que salían de la casa marcada con el número 1508, de la avenida Húemac, en la colonia Azteca, lo que orillaron a Beatriz Muñoz Pérez, a reportar a las autoridades lo anterior al no saber nada de su vecino Arturo Gómez.

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Una tía de Arturo llegó al lugar.

La mujer interceptó la unidad preventiva 137, sobre la misma avenida pero a la altura de un centro comercial para pedirles que la acompañaran hasta el domicilio de su vecino Arturo. Debido a que el olor era insoportable, los oficiales pensaron lo peor, tuvieron que saltar la barda ya que el portón y el barandal tenían candados.

“Él vivía en un cuarto que tiene atrás de la casa, porque esa la rentaba, pero de momento estaba solo, pues nadie la habitaba; lo que se hizo raro es que desde el viernes pasado deje de verlo y el siempre que salía dejaba una reja cerrada, vi que uno de sus perros no estaba y al percibir el olor pensé que se trataba del animal muerto” indicó Beatriz a las autoridades.

La vecina agregó que se le hizo extraño que Arturo no sacara su basura, ni se le viera regando el patio. “Dije, si el perro se murió, ¿por qué no lo tira? Además el domingo uno de sus conocidos le dejó un recado en el barandal pero no lo recogió” expresó Beatriz.

Luego que las autoridades indagaran en el lugar, dentro de un cuarto fue encontrado el cuerpo de Arturo, quien contaba con 65 años de edad, era soltero además de ser sordo y tener problemas de lenguaje.

El cadáver estaba putrefacto sobre una cama, por lo que al confirmar el deceso, las autoridades preventivas al mando del responsable de turno, Pedro Flores, pidieron la intervención de los detectives de la Agencia de Investigación Criminal.

El cuerpo de don Arturo se encontraba en avanzado estado de putrefacción.

Para descartar que la muerte del sexagenario fuera a consecuencia de un homicidio, los sabuesos de la Fiscalía General del Estado solicitaron el apoyo del personal de Servicios Periciales, quienes llegaron a fijar la escena y recabar la evidencia a pesar que el olor en el ambiente era insoportable.

Minutos más tarde, una tía del hoy occiso arribó hasta el domicilio para enterarse de lo sucedido.

El cuerpo fue trasladado al anfiteatro donde sería sometido a la necropsia de ley para esclarecer cuales fueron las causas de la muerte de don Arturo.

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