En una entrevista para Aristegui Noticias, El contralmirante José Orozco Tocaven, jefe de la Unidad de Comunicación de la Marina Armada de México, dio a conocer como fue la detención de Rafael Caro Quintero.
De nueva cuenta, el contraalmirante recordó que ningún agente de la DEA participó en la detención del infame narcotraficante, pero asegurando que fue el trabajo de inteligencia entre varias agencias logra que la captura de los criminales sea más fácil.
“Lo que sí existe es un acuerdo de intercambio de información entre la Marina, la DEA y muchas otras instancias de Estados Unidos, así como de otros países como Perú, Chile. Este intercambio de información es el que nos permite a nosotros y a los demás países asegurar objetivos importantes para los intereses de cada país”, expuso el contralmirante.
El militar relató que las Fuerzas Especiales ya le llevan la pista semanas antes de la captura del narcotraficante, señalando que este se movía en San Simón, un poblado muy pequeño inaccesible para personas ajenas a la comunidad.
Las fuerzas especiales habrían aprendió las costumbres de Caro Quintero, para capturarlo en un momento desprevenido con la ayuda de tres helicópteros.
“Una vez que el área de inteligencia tiene bien limitado cuál es el blanco y el momento preciso para asegurarlo. Es cuando entra la Unidad de Operaciones Especiales, llegaron en helicópteros de la Marina y tomaron al objetivo”.
El contraalmirante recuerda que Caro Quintero intentó escapar sin embargo fue un elemento canino quien logró dar con el hombre más buscado del FBI.
