Durante las primeras horas de la mañana, civiles del estado de Sinaloa reportaron las apariciones de narcomantas que estaban firmadas por la facciones de Los Chapitos, donde se amenazaba a quien estuviera involucrado en el tráfico de fentanilo.
Debido a esto. Sara Bruna Quiñónez, fiscal general del estado de Sinalo señaló que estos mensajes estaban dirigidos al gobierno del estado comandado por el gobernador morenista, Rubén Rocha Moya.
En una rueda de prensa, la fiscal respondió de manera positiva a la pregunta de que si estos mensajes iban dirigidos al estado, aunque no se dieron las razones de porque el mensaje donde se amenazaba para dejar de procesar fentanilo, está dirigido al estado.
Bajo ese tenor, descartó que en Sinaloa haya venta de fentanilo en su materia prima, aunque reconoció que sí se puede encontrar el mortal opioide sintético una vez procesado.
“El fentanilo como materia prima de la droga no se está vendiendo, no se ha encontrado; se encuentra procesado. Es un tema que no manejamos nosotros directamente”, dijo la fiscal.
En los municipios de Culiacán, Mazatlán, Guamúchil y Ahome aparecieron mantas firmadas por Los Chapitos, donde se amenaza a quien quiera que fuera partícipe del tráfico de fentanilo, así mismo, la organización negó ser parte de esta, tal y como acusa la justicia americana.
“Debido a la incesante desinformación de algunos medios de comunicación y la evidente omisión del gobierno al no investigar y perseguir a los verdaderos culpables de esta epidemia, en Sinaloa queda estrictamente prohibido la venta, fabricación, transporte o cualquier tipo de negocio que involucre a la sustancia conocida como fentanilo, incluyendo la venta de productos químicos para su elaboración”, se leía en las mantas.
“Nosotros jamás hemos establecido, a sabiendas, relaciones con personas que trafican fentanilo”, se leía en la misiva que fue atribuida a Jesús Alfredo, Iván Archivaldo, Joaquín y Ovidio Guzmán