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EDUCARTE

TEMA: Disciplina Positiva: nuevo modelo educativo

Elisa Zenaida Morales
Por Elisa Zenaida Morales - 09 agosto, 2021 - 08:54 a.m.
EDUCARTE

Por: Elisa Zenaida Morales

 La disciplina positiva en los niños se basa principalmente en la comunicación, respeto, amabilidad, amor, entendimiento mutuo y la empatía.

Es una manera más efectiva, entendida como un recurso para el desarrollo infantil, que busca formar en los niños la felicidad y el bienestar de los menores, y a través del cual los niños aprenden a ser responsables y autónomos. Se basa en el respeto mutuo, respeto al hijo, a los padres y otras personas, estableciendo reglas y normas comunes sin imponerlas.

Es una forma de disciplinar a los niños dejando a un lado el  control extremo y la excesiva autoridad, como de la permisividad, basándose en la comunicación, el respeto y el afecto.

 Ya que tenemos que considerar que una forma de educar extremadamente permisiva puede generar inseguridad y temores en los niños, además de potenciar actitudes más egocéntricas y exigentes. Al contrario, las reglas y normas permiten que los niños se sientan más seguros y puedan darle un orden a su mundo, sabiendo exactamente qué se espera de ellos. Por supuesto, hay que encontrar un equilibrio entre los límites y la libertad, la respuesta podría hallarse en la Disciplina Positiva, un método diseñado para enseñar a los niños a convertirse en personas responsables, respetuosas y autónomas.

Por lo que es importante que los niños conozcan cuales son las normas y los límites para saber cómo comportarse y como educadores mostrarles cómo hacer las cosas correctamente. Siendo más positivos en la forma de corregir y señalar, dándole alternativa de resolución  de conflictos.

Cuando el niño tiene un comportamiento inapropiado, la primera reacción de los padres suele ser gritarle y reprenderle, reprochándole su mal comportamiento. Sin embargo, los reproches solo generan frustración, por lo que es importante promover mejor la reflexión de los actos. Asume que lo hecho, hecho está, así que lo más importante es buscar el motivo e intentar reparar el daño, evitando que esa conducta se repita en el futuro. Pregúntale por qué lo ha hecho, pídele que reflexionar sobre las consecuencias de sus actos y que se disculpe por el daño causado.

Se puede disciplinar desde el amor y el respeto. Por tanto, a la hora de disciplinar asegúrate de mantener la calma e intenta ponerte en su lugar. A veces un poco de empatía no viene nada mal pues en muchas ocasiones no nos damos cuenta de que le exigimos demasiado a los niños pretendiendo que se comporten como adultos. Eso no significa excusar los malos comportamientos, sino tan solo corregirlos desde el amor y la comprensión, no desde la ira y la frustración.

 El niño dentro de la disciplina debe conocer que está permitido y que no, por eso en la educación, rutinas, valores los padres deberán mantenerse firmes, pero todo con base a respeto y como herramienta el amor, el criterio y hacerle razonar el por qué, y no solamente la imposición

 La disciplina positiva siempre será una de las alternativas más efectivas en el desarrollo de los niños entendida como un recurso para el desarrollo infantil sano, que procura la felicidad y el bienestar de los menores, y a través del cual los niños aprenden a ser autónomos y responsables.

“La disciplina positiva en los niños los hará crecer y desarrollarse en un campo lleno de valiosas oportunidades para lograr sus metas”

*La autora es Licenciada en Educación Inicial, Instructora de Estimulación Temprana, Directora de la Institución Educativa Peek-A-Boo Learning Center. Contacto: em33@hotmail.com Facebook Elisa Zenaida Morales,  Instagram: ElisaZenyMorales

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