Las
artes marciales mixtas son uno de los deportes
de contacto más agresivos en los cuales se puede obtener la victoria por
nocaout, descalificación o rendición, pero el sábado por la noche durante el
evento 224 de la UFC la rendición no fue aceptada por el entrenador de una peleadora.
La
pelea entre
Raquel Pennington y Amanda Nunes se vio opacada por la polémica decisión del entrenador de
Pennington,
Jason Kutz, quien no detuvo la
pelea y expuso la salud de su dirigida.
Durante el descanso del cuarto round,
Raquel Pennington se dirigió explícitamente a su entrenador
pidiéndole que detenga la pelea.
“Se acabó. Se acabó. Quiero terminar”, fueron las sentidas palabras de
Pennington a Jason Kutz, quien lejos de cuidar
la integridad de su peladora, en una decisión más que
polémica decidió continuar con la pelea.
Dicho episodio generó la victoria de
Amanda Nunes por KO durante el
quinto round, quien se proclamó campeona de
peso “gallo” de la UFC. De igual forma
Raquel Pennington terminó la
pelearodeada de un charco de sangre y tuvo que ser trasladada al hospital.
Adicionalmente, su rival,
Amanda Nunes lamento el hecho y comentó que desconocía la situación de
Raquel Pennington: “Ni siquiera lo sabía. Me lo dijeron en el vestuario y es triste porque se pudo evitar. Ella terminó en el hospital y puede ser una lesión grave. Mi entrenador no me dejaría pasar por eso. Creo que necesita rodearse de gente que quiera lo mejor para ella”, sentenció.
https://youtu.be/DwSpuLujhkE