PIEDRAS NEGRAS – Una bebé de tan solo dos meses, identificada como Anete, fue trasladada de urgencia al Hospital General de Zona Número 11 del IMSS tras sufrir una intoxicación con diésel.
La menor, originaria de Allende, llegó al hospital en estado delicado, acompañada de sus padres, Julia Estela, de 20 años, y Oscar, de 22.
En un giro inesperado, los padres decidieron solicitar el alta voluntaria de la pequeña, abandonando el hospital antes de que los elementos de la Agencia de Investigación Criminal pudieran intervenir.
Esta decisión se produjo tras la notificación de los médicos a las autoridades sobre el preocupante estado de salud de la bebé.
Ante esta situación, la Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia (PRONNIF) del estado fue alertada para evaluar el entorno familiar de Anete y determinar las acciones legales y de protección que sean necesarias.
Hasta el momento, no se han proporcionado más detalles sobre las circunstancias que llevaron a la intoxicación ni el paradero actual de los padres.
Las autoridades están en proceso de investigar si se trató de un accidente o si hubo alguna forma de negligencia que pudiera haber puesto en riesgo la vida de la bebé.
Este caso ha suscitado preocupación en la comunidad y pone de manifiesto la necesidad de atención y protección para los más vulnerables.
