PIEDRAS NEGRAS, COAH. – A raíz de crecer en una familia disfuncional, llena de maltrato físico y psicológico, David vivió una infancia lamentable, razón que influyó principalmente para vivir durante 18 años en las adicciones.
Ahora en proceso de recuperación, alejado de las drogas y el alcohol, cuenta su historia e invita a los jóvenes y adultos por igual, a renovarse junto al año nuevo y salir del voraz mundo de las adicciones, como uno de los mejores propósitos para estas fechas, aunque reconoce que cualquier fecha es perfecta para abandonar los vicios.
“Como todos los días había peleas yo empecé a ser un niño raro, alejado de los demás, empecé a llenarme de resentimiento”, cuenta para Periódico La Voz.
Criado por sus abuelos, abandonado por sus padres, David llegó a la secundaria, época en la que aprovechó para volverse rebelde, dejar de estudiar y empezó a fumar a los 12 años.
“Yo quería experimentar, quería saber que se sentía, entonces como mi abuelo tenía cirrosis y estaba en el hospital, toda la atención la tenía él, yo empecé a consumir solventes a los 13 años y ya no pude parar”, asegura.
Encuentra la historia completa en el especial de la página 4 de esta edición.
