PIEDRAS NEGRAS, COAH. – La colonia Nueva Vista Hermosa enfrenta una serie de problemáticas sociales y urbanas que han encendido la preocupación entre sus habitantes. La falta de mantenimiento en predios, banquetas, áreas deportivas y, sobre todo, en sus calles, ha hecho que esta comunidad se sienta relegada y sin respuesta por parte de las autoridades. A esto se suma un factor estacional que agrava la situación: durante la temporada de lluvias, las inundaciones son recurrentes.
Uno de los principales reclamos de los vecinos es la falta de limpieza en lotes baldíos, los cuales se han convertido en focos de infección y refugio de fauna nociva como roedores, insectos y hasta animales venenosos. Además, temen que estos espacios abandonados sean utilizados como tiraderos clandestinos o refugio para personas ajenas a la comunidad.
Particular inquietud ha generado un predio en donde anteriormente se encontraba un jardín de niños, el cual fue reubicado por encontrarse en una zona de constante inundación. Tras su demolición, el terreno no ha recibido mantenimiento, lo que ha permitido que la maleza crezca sin control. "Es un riesgo para todos, sobre todo para los niños, por las víboras y zancudos. Además, puede ser un punto de encuentro para actividades ilícitas", expresó una de las vecinas.
Otra de las carencias más sentidas por los habitantes, especialmente los jóvenes, es el deterioro del campo de futbol de la colonia. A pesar de ser uno de los pocos espacios recreativos, se encuentra en condiciones inadecuadas para la práctica deportiva. El terreno ha sido utilizado como tiradero de escombro y la falta de mantenimiento ha provocado que el pasto y los desniveles representen un riesgo de lesiones.
"Nos gustaría que nos pusieran atención. Este campo podría ser un espacio para alejarnos de los vicios, pero en lugar de eso parece un basurero", comentó un joven habitante de la zona.
A esta lista se suma el mal estado de las calles, muchas de ellas intransitables, llenas de baches, sin pavimentación o completamente erosionadas por las lluvias. A esto se añade la falta de alumbrado público en varios sectores, lo que contribuye a que la sensación de inseguridad crezca entre los vecinos.
Pese a que a pocos metros se encuentra una base de la Policía Municipal, la presencia de personas en situación de calle o con problemas de adicción es constante. "No hay luz en muchas partes, y eso hace que estas personas se metan en patios o anden rondando sin que nadie los vea. Tenemos miedo", denunció otra residente.
