De tal modo, que la FIFA basa el modo de desempate en el criterio del Fair-Play.
Los dirigidos por Juan Carlos Osorio cuentan con dos tarjetas amarillas y 15 faltas cometidas. Mientras que, Suecia solamente suma una amonestación y 20 faltas. Tras tener las mismas unidades, las tarjetas son el medio de desempate.
Historia similar a la de España y Portugal. El combinado español cuenta con una amonestación convirtiéndolo en el líder del grupo B con cuatro puntos. Mientras que los lusos, tras sumar dos tarjetas amarillas están situados en la segunda posición, a pesar de contar de igual forma con cuatro unidades.