Atlético de Madrid se impuso 3-1 al Athletic de Bilbao para seguir defendiendo su puesto de Champions en la 33ª jornada del campeonato español, en la que el Almería cayó matemáticamente a Segunda División.
Los madrileños se adelantaron en el estadio Metropolitano con un gol de Rodrigo de Paul (14), pero Nico Williams igualó antes del descanso (44), antes de que Ángel Correa pusiera el 2-1 (51) y Unai Simón marcara en propia puerta el 3-1 (79).
El Atlético mantiene su cuarta posición liguera, la última que da entrada a la Champions, ahora a seis puntos de los vascos, su principal perseguidor, a falta de cinco jornadas para el final del campeonato.
Atlético, sin posibilidades de luchar por LaLiga y tras su eliminación en Champions, tiene como principal objetivo lograr esa plaza en la máxima competición continental.
Los rojiblancos se adelantaron al cuarto de hora al soltar un disparo lejano De Paul que se coló en la portería de Unai Simón tras dar un defensa (14).
El tanto espoleó al Athletic que buscaba llegar al área contraria con las rápidas acometidas de Nico e Iñaki Williams.
Un error de Antoine Griezmann en un pase atrás permitió un contraataque de los vascos que culminó Nico Williams rematando solo ante Jan Oblak para empatar (44).
El pequeño de los Williams festejó su gol señalándose el brazo, aparentemente en respuesta a insultos racistas que recibió unos minutos antes por parte de hinchas locales, lo que obligó a parar unos minutos el encuentro y dar un aviso por megafonía.
He ido a sacar el córner y he oído sonidos de mono, la verdad es que han sido pocos y gente tonta hay en todas partes", explicó Nico a DAZN tras el partido.
El Atlético volvió del descanso más intenso, presionando más arriba al Athletic hasta lograr adelantarse de nuevo cuando Ángel Correa recibió un balón en profundidad para meterse en el área y hacer el 2-1 (51).
Los rojiblancos llegaban más al área contraria, mientras los vascos seguían buscando la llegada por las bandas para meter balones al área, hasta que Samuel Lino soltó un disparo que dio en el palo y tras rebotar en la espalda de Unai Simón entró en la portería vasca poniendo el 3-1 (79), que cerró el partido.
