Hay muchos motivos o razones que una persona tiene como justificación para practicar algún deporte, sea cual fuere, pero la gran mayoría lo realiza como una actividad que lo activa físicamente.
Sin embargo, para algunos que son especialistas o personas que viven la experiencia de enseñar o dirigir equipos, el deporte va más allá que una simple competencia, trofeo o activarse físicamente, tal como opinaron algunos monclovenses.
Activarse físicamente no es practicar un deporte, pero puede ser el inicio para adentrarse en la práctica de manera formal y sistemática de una disciplina. Muchas personas han iniciado de esa forma y se dan cuenta de lo que pueden encontrar muchas cosas interesantes que sin darse cuenta cambian la vida de una persona.
No es la meta la que persigue solamente, también es una forma de vivir.
Estriba mucho la orientación de un instructor con experiencia para que el practicante tenga resultados que le beneficien. Cuando hay entrenadores que sólo persiguen satisfacer su ego con un trofeo, o no tienen la sensibilidad o conocimientos suficientes, lamentablemente los resultados serían perjudiciales que podrían acabar en la frustración o lesión del atleta.
Aunque cada deporte tiene actividades y objetivos diferentes, la actividad que promueve sin duda cambia no sólo el aspecto físico, sino también el emocional y psicológico.
Aquél que hace ejercicio de manera regular, apoyado por una buena alimentación y hábitos de sueño, encuentra una salud física y emocional, lo que repercute en una mejoría en la vida diaria.
Sin embargo aquel que se enfoca a practicar un deporte de manera sistemática, donde la constancia, la perseverancia, la disciplina, los retos, la derrota, la victoria y la mejoría constante de la técnica y estrategia para lograr un resultado, trasciende profundamente en la manera de ver la vida de un atleta.
Algunos mencionan que un deporte es mejor que otro, pero hay que tomar en cuenta la personalidad y la actitud de una persona para ubicar el deporte más adecuado para el aspirante, no habrá mejor ni peor, solamente el más apropiado.
Entre esos aspectos que hay que destacar para el aspirante es la edad, su complexión, habilidades y carácter, entonces sabremos si es mejor un deporte individual, de equipo, de contacto directo, etc. Pero lo más importante de practicar deporte, es que el individuo tenga el beneficio de encontrar la armonía consigo mismo, con autoestima, con las herramientas necesarias para enfrentar los retos de la vida, con humildad y la actitud de servir, es cuando entonces se cumple la misión de tomar el deporte no como fin, sino como un medio o forma de vida.