Este jueves 10 de abril se confirmó el fallecimiento de Leo Beenhakker a los 82 años de edad. El técnico neerlandés fue una figura clave en el futbol internacional, recordado por su paso por equipos de renombre como el Real Madrid, Club América, Chivas y la selección de los Países Bajos.
Con el Real Madrid, club al que dirigió entre 1986 y 1989, y brevemente en 1992, Beenhakker logró conquistar tres títulos de Liga, una Copa del Rey y dos Supercopas de España. La institución merengue lamentó profundamente su partida y envió sus condolencias a sus familiares, amigos y seguidores.
En el futbol mexicano, su legado quedó marcado por su llegada al América en 1994, donde fue reconocido por imponer un estilo de juego vistoso y ofensivo. Bajo su dirección, destacaron figuras como Francois Omam-Biyik, Kalusha Bwalya y Joaquín del Olmo. Aunque su primera etapa finalizó en 1995, regresó al club en 2003-2004 y fue quien confió en Guillermo Ochoa en sus primeros años.
También dirigió al acérrimo rival del América, las Chivas, entre 1995 y 1996, confirmando su impacto en el futbol mexicano desde distintas trincheras.
La Eredivisie, liga de su país natal, lo despidió llamándolo "el legendario entrenador de futbol". Mientras tanto, en Polonia también se le reconoció como un personaje histórico en el ámbito deportivo.
Su salud se había deteriorado en los últimos meses, según reveló su representante Rob Jansen, aunque no se ha confirmado la causa específica de su fallecimiento.
Con la partida de Leo Beenhakker, el futbol pierde a un estratega que dejó huella en cada equipo al que llegó.