En la previa del Gran Premio de Bahréin, Fernando Alonso compareció ante la prensa mostrando un ánimo renovado respecto a su desempeño en el reciente GP de Japón. El piloto asturiano enfatizó la paridad que caracteriza al actual campeonato de Fórmula 1, señalando que "está todo muy apretado, el campeonato es muy largo y no nos daremos por vencidos". Además, destacó la motivación del equipo Aston Martin para "trabajar más y llevar piezas nuevas a cada carrera que podamos".
Alonso reconoció que las primeras tres carreras han servido para identificar áreas de mejora en el AMR25, especialmente en curvas lentas y velocidad punta, aspectos que considera como posibles debilidades. El piloto espera que el equipo tome nota de estos desafíos para implementar mejoras en la aerodinámica y configuración del coche en las próximas competencias. Se prevé que estas actualizaciones puedan introducirse en el GP de Miami o en el inicio de la temporada europea.
Asimismo, Alonso elogió el desempeño de Max Verstappen, resaltando su nivel de pilotaje y comparándolo con su propia experiencia en 2012 con Ferrari, cuando compitió por el campeonato sin contar con el mejor coche de la parrilla. Estas declaraciones reflejan la admiración de Alonso por aquellos pilotos que destacan incluso sin tener el monoplaza más competitivo.
