GUADALAJARA, JALISCO.– Lo que parecía el regreso triunfal de un canterano al club de sus orígenes, terminó siendo una historia breve y agridulce. Víctor "Pocho" Guzmán pasó de ser capitán y figura con Chivas a quedar fuera de los planes para el Apertura 2025.
Formado en la cantera del Rebaño, Guzmán debutó profesionalmente con el Pachuca, club donde se consolidó como uno de los mejores mediocampistas ofensivos de México, destacando por su capacidad goleadora. Sin embargo, su primer intento de llegar a Chivas en 2020 fue frustrado por un resultado adverso en un control antidopaje.
Tras su suspensión y regreso con los Tuzos, volvió a Chivas en 2023 bajo la dirección deportiva de Fernando Hierro, y su impacto fue inmediato: capitán del equipo, goleador y pieza clave para que el Guadalajara llegara a una final tras cinco años de sequía.
Pese a un arranque prometedor, las lesiones y cambios de posición afectaron su rendimiento. Su protagonismo se diluyó y el técnico Gabriel Milito decidió no considerarlo para el siguiente torneo. Con un valor de mercado que cayó de 6.5 a 2.3 millones de euros, Guzmán ha vuelto al Pachuca, donde disputará el próximo Mundial de Clubes.