YEDA.- Real Madrid requirió de 120 minutos y cuatro lanzamientos de penal para doblegar a un aguerrido Atlético de Madrid y convertirse en el monarca de la Supercopa de España de la temporada 2018/2019, su décimo primer título de esta índole en sus vitrinas.
El compromiso fue de alta intensidad durante cada minuto transcurrido, sin embargo la efectividad defensiva de los colchoneros y la gran actuación del portero esloveno Jan Oblak impidieron que un insistente Real Madrid se llevara el título a casa en las primeras fases del juego.
En la tanda de penales, Daniel Carvajal, Rodrygo, Luka Modric y Sergio Ramos cobraron de buena forma para la causa merengue, caso contrario a los tiradores de “Atleti” que fallaron sus dos primeros intentos en los pies de Saúl Ñíguez y Thomas Partey, y solamente Kieran Trippier pudo batir el arco de Courtois, aunque fue insuficiente para continuar en la batalla.
La primera parte fue muy pareja aunque poco atractiva y ningún conjunto tuvo claras oportunidades de adelantarse en el marcador, pues los Colchoneros se abocaron a defender el cero en su arco y cortar los circuitos del sistema merengue mediante repliegues defensivos hasta con sus 11 elementos detrás del esférico.
Real Madrid tuvo en los disparos de Luka Modric y Casemiro dos tenues intentos, que fueron bien resueltos por Jan Oblak, mientras las contadas aproximaciones colchoneras, más por empuje físico que por elaboración de jugadas, terminaron con el esférico desviado del arco de Thibaut Courtois.