Comerciantes de la Zona Centro se aterrorizaron al ver como hombres armados le cerraron el paso a un joven y lo subieron a la camioneta en la que viajaban.
De inmediato los reportes al Sistema Estatal de Emergencias no se hicieron esperar, provocando una fuerte movilización policiaca activando la alerta máxima, pero cuando las unidades iban llegando sobre la calle Rafael de la Fuente entre las calles Hidalgo y Juárez, se aclaró que eran elementos de la Agencia de Investigación Criminal que estaban realizando sus labores.
Los vendedores de comida establecidos fuera de una conocida tienda estaban más alarmados, pues pensaban que se trataba de un secuestro, por la manera en que los agentes trataban al transeúnte.
De inmediato se cerró la alerta máxima y los elementos de la Policía Municipal, así como las demás corporaciones continuaron con su rutina.
Otra nota:
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