Un lavacoches que tenía fuertes problemas de adicciones fue encontrado sin vida dentro de unas tapias de la colonia Pedregal de San Ángel, lo que movilizó a las autoridades y socorristas de Cruz Roja Mexicana.
El hoy occiso fue identificado por su madre como Efraín Abelardo Sánchez Ruíz, quien contaba con 26 años de edad, quien tenía su domicilio en la calle Sawatova, número 419, de la colonia Del Río.
El cuerpo de Efraín fue encontrado en unas tapias.
Fue la tarde de ayer, cerca de las 16:30 horas cuando una llamada anónima ingresó al 911 alertando a las autoridades sobre un hombre sin vida dentro de unas tapias.
De inmediato, elementos preventivos y socorristas de la benemérita institución acudieron hasta la calle Durango, entre el bulevar San José y la calle Saltillo, detectando en unas tapias ubicadas a espaldas de un lote baldío, el cuerpo de Efraín.
El joven de 26 años adecuó el lugar como su hogar, estaba tendido boca arriba, por lo que las autoridades de inmediato acordonaron el área para posteriormente dar aviso a los detectives de la Agencia de investigación Criminal.
Los socorristas determinaron que el joven pudo morir bronco aspirado debido al estado en el que se encontraba.
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María Elena Ruíz Martínez, de 47 años, madre del infortunado refirió a las autoridades que su hijo tenía problemas con el alcohol y las drogas, lo que deterioró su salud.
Agregó que su hijo, quien era lavacoches y traga fuegos estuvo internado en el Hospital Amparo Pape de Benavides, por lo que fue dado de alta apenas el pasado miércoles.
Los sabuesos de la Fiscalía General del Estado y los elementos de Servicio Periciales tuvieron que brincar una barda de block que divide las tapias del baldío para poder llegar hasta dónde se encontraba el cadáver, determinando que no presentaba signos de violencia.
Tras fijar la escena, los peritos ordenaron el levantamiento del cuerpo, por lo que el personal de una funeraria realizó las maniobras pertinentes para sacar el cadáver de Efraín y llevarlo al anfiteatro, dónde sería sometido a los trámites de rigor.
Personal de Servicios Periciales y detectives de la Agencia de Investigación Criminal realizaron las diligencias correspondientes.
