MONCLOVA, COAH. – Como si se tratara de una escena bíblica pero sin moraleja, dos hermanos protagonizaron una pelea callejera digna de barrio bravo, ganándose no el perdón, sino una noche tras las rejas.
Se trata de Jonathan Américo y Luis Alejandro Neira Alvizo, de 20 y 22 años de edad, quienes olvidaron los lazos de sangre y se agarraron a golpes frente a vecinos de la colonia Guerrero.
La trifulca ocurrió pasado el mediodía de ayer sobre la calle Jiménez, cuando los hermanos Neira Alvizo, sin importar el calor ni las miradas curiosas, decidieron resolver sus diferencias a puño limpio, como en los viejos tiempos... pero sin ring ni referee.
Los testigos, preocupados por que la cosa pasara a mayores, llamaron al 911 para reportar la pelea. Minutos después, oficiales de la unidad 226 de la Policía Municipal arribaron al lugar y, como si fueran árbitros en pelea de campeonato, se metieron entre los contendientes para separarlos y evitar que uno de los dos viera luces que no eran del sol.
Al ser interrogados, ninguno de los dos quiso confesar el origen del conflicto, aunque se sospecha que podría tratarse de algún pleito casero o herencia mal repartida (o simplemente un control remoto perdido).
Ambos fueron arrestados y trasladados a la Comandancia Municipal, donde el juez en turno ordenó su ingreso temporal a las celdas, "hasta que se les bajara lo broncudo y recordaran que son hermanos y no rivales de la UFC".
