Luego de que se llevara a cabo la audiencia en el caso de “Chelita”, José Antonio Obregón padre de la menor mencionó que cuando vio a los dos imputados sintió mucha impotencia por no poder hacerles nada, ni siquiera reclamarles o preguntarles porque le hicieron eso a su hija.
José Antonio mencionó que mientras se desarrollaba la audiencia en la que se dictó auto de vinculación a proceso, tuvo contacto visual con uno de los acusados, que constantemente se le quedaba viendo, “Tal vez me conoce, pero yo a ellos no los había visto nunca”, señaló.
Estaba consternado al salir del Centro de Justicia Penal cuando fue abordado por la prensa, a quienes evadió las preguntas señalando que no podía dar detalles acerca de lo que se vivió en la audiencia a fin de no entorpecer las investigaciones.
“No soy nadie para perdonar, soy una persona común, pero la justicia divina de esa así nadie se salva, en mi interior yo no los perdonó, soy muy rencoroso, no podría perdonarlos nunca”, señaló José Antonio Obregón. Confía en que las autoridades harán su trabajo como hasta ahorita lo han hecho, consideró que se está haciendo justicia por la muerte de su hija, pero aún hay muchas interrogantes, lo único que le queda es esperar. “La audiencia estuvo bien, en su momento se dará a conocer lo que realmente pasó”, señaló el padre de la menor.
Dijo que los imputados se han negado a declarar, además mencionó que en la audiencia solo estuvieron ellos dos. Lo único que resta es recordar a su hija como era, una jovencita feliz, su padre mencionó que la última vez que la vio fue en una fiesta, ella estaba feliz, contenta, porque casi no se veían físicamente, aunque siempre estaban en contacto a través del celular.
